jueves, 5 de noviembre de 2015

CASI EN LO YERMO




Alguien apostó por este silencio
en la intemperie del abismo.
Inmensidades, clausuras,
vocablos azorados por las ráfagas
amenazadoras.

lunes, 2 de noviembre de 2015

Animal político: animal lírico





Creo mucho en la poesía que, sin renunciar a la invención (el desdoblamiento, el absurdo cotidiano, la destilación de situaciones apócrifas) mantiene un vínculo isotópico con el devenir y, a la manera realista, se solaza en alusiones que nos sirven para metabolizarla, quizás de manera oblicua, como textos sentenciosos donde la sentencia se debe derivar de una lectura cómplice, aunque no solo para los avisados sirva.

Creo mucho también en una poética –quizás más afincada en la tradición anglosajona que en la hispánica– donde el verso, con la contundencia de la frase rotunda gana implicaciones, más a través de la síntesis expresiva y el juego de espejos que del desborde barroco o la elegancia modernista. La ironía y el cinismo, este último al modo de la escuela de Antístenes de Atenas, despojado de la impronta peyorativa con que lo vemos hoy, son rasgos visibles en la expresión lírica de este corte, sobre todo cuando cuestiona –lo más frecuente– la hipocresía, la demagogia, la tozudez política, los falsos (o desgastados) paradigmas que nos negamos obcecadamente a desactivar para recomponer.